¿Qué es la Candidiasis oral?

La Candidiasis oral llamada  también Muguet oral o Candidiasis orofaríngea,  es una infección causada por una levadura llamada Candida. La cándida normalmente vive en el tracto digestivo y en la piel sin causar ningún problema. La Candida puede multiplicarse y causar una infección si el ambiente dentro de la boca, la garganta o el esófago cambia de una manera que fomenta el crecimiento de hongos. El hongo Candida albicans causa aftas orales.

La candidiasis bucal ocurre con mayor frecuencia en bebés y niños pequeños. Causa protuberancias blancas en las mejillas y la lengua internas. Estos crecimientos usualmente desaparecen una vez que se recibe el tratamiento. La candidiasis oral suele ser leve y rara vez causa complicaciones. Sin embargo, la condición puede ser problemática para aquellos pacientes inmunodeprimidos.

La candidiasis bucal puede darse cuando existe inmunosupresión por uso de  ciertos medicamentos que reducen la cantidad de microorganismos buenos que naturalmente previenen la infección. Los tratamientos contra el cáncer, incluida la quimioterapia y la radiación, también pueden dañar o matar células sanas. Esto lo hace más susceptible a la candidiasis oral y otras infecciones.

Factores de riesgo

Las enfermedades que atacan su sistema inmune, como la leucemia y el VIH, también aumentan su riesgo de aftas orales.

La diabetes, otra enfermedad que afecta el sistema inmunitario, también puede contribuir al afta oral. Si tiene diabetes no controlada, puede tener un alto nivel de azúcar en la saliva.

El mismo hongo que causa la candidiasis oral también causa infecciones por levaduras, por lo que las mujeres embarazadas con una infección vaginal por hongos pueden ocasionalmente transmitirle una infección por hongos a su bebé durante el parto.

Síntomas y Signos

Los síntomas de la candidiasis oral son los siguientes:

- Protuberancias blancas cremosas en la lengua , mejillas internas, encías o amígdalas.

- Leve sangrado cuando las lesiones son raspadas.

- Dolor en el sitio lesionado

- Queilitis angular, o piel seca y agrietada en las comisuras de la boca.

- Dificultad para tragar.

- Un mal sabor en la boca.

En los bebés, las aftas orales ocasionalmente puede causar: dificultad para alimentarse, agitación e irritabilidad. Los bebés con aftas orales pueden transmitirlo a sus madres durante la lactancia.

Las madres y sus bebés pueden quedar atrapados en un ciclo de transmisión. Si está amamantando y sus senos contraen el hongo, puede experimentar: picazón intensa, sensibilidad o dolor en los pezones, piel descamada o brillante en el área que rodea el pezón, dolor severo durante la lactancia, dolor agudo y penetrante en el pecho.

Pacientes con riesgo de tener aftas orales

Los bebés y los niños pequeños tienen el mayor riesgo de desarrollar aftas orales. Sin embargo, también puede afectar a las personas inmunodeprimidas y estar en mayor riesgo de aftas orales si presenta: diabetes, anemia o VIH, pacientes que usan antibióticos o corticosteroides, pacientes con tratamiento de  quimioterapia, radiación o medicamentos para tratar el cáncer, fumadores, pacientes con trasplante de órgano reciente.

Diagnóstico

La Candidiasis oral se puede detectar en muchos casos con un simple exámen oral, por la presentación de las  prominencias blanquecinas características.

En algunos casos, se puede tomar una biopsia para confirmar el diagnóstico. Si hay aftas orales en el esófago, se realizan  procedimientos para garantizar un diagnóstico preciso. Estos pueden incluir un cultivo de frotis faríngeo y una endoscopia.  También pueden extraer una muestra de tejido para su inspección.

                      cultivo de frotis

            Biopsia                                                                           

Tratamiento

El tratamiento para la candidiasis oral varía según la edad y estado general del paciente. El objetivo del tratamiento es prevenir el crecimiento y la diseminación del hongo.

La candidiasis oral, en la  garganta o el esófago se trata con medicamentos antimicóticos.  

El tratamiento para las infecciones leves a moderadas en la boca o la garganta suele ser un medicamento antifúngico aplicado en el interior de la boca durante 7 a 14 días. Estos medicamentos son: el clotrimazol, miconazol o nistatina.

• La Nistatina puede presentarse en enjuague bucal antifúngico que bromea en su boca y luego traga. En un bebé, se limpia en la boca.

• El fluconazol se utiliza para las infecciones graves, que puede ser administrado por vía oral o intravenosa.

• El Itraconazol. Este antimicótico oral se usa para personas que son resistentes a los tratamientos iniciales o que tienen VIH.

• Anfotericina B. Este medicamento se usa para tratar casos severos.

Una vez que comienza el tratamiento, la candidiasis oral generalmente desaparece en un par de semanas. Sin embargo, la candidiasis oral puede regresar nuevamente en el futuro. Una cura completa es más probable si tiene un sistema inmune saludable y no tiene otras enfermedades.

Use un medicamento antimicótico para el bebé y una crema antifúngica para los senos de la madre, como terbinafina o clotrimazol.

Recomendaciones para el paciente

- Limpiar la crema del seno antes de alimentar a su bebé para evitar que se meta en su          boca.

 - Cepillado de  los dientes con un cepillo de cerdas suaves para evitar raspar las lesiones.

- Reemplazo  del cepillo de dientes al final del tratamiento.

- Limpieza correcta de la prótesis dentales.

- Uso exclusivo de enjuagues bucales prescritos por el odontólogo.

- Control  de parámetros normales en pacientes diabéticos.

- Enjuague de chupones, los pezones de las botellas y todas las piezas de un sacaleches      en una solución de la mitad de agua y mitad de vinagre. Permitir que los artículos se       s    sequen al aire. También puede lavarlos con agua caliente en el lavavajillas y dejarlos            secar  al sol.

- Usar almohadillas de lactancia para evitar que el hongo se propague a la ropa.